Macetas y jardinería en el hogar

Muchos de nuestros cambios de hábitos se deben a que buscamos sentirnos mejor. Podemos empezar con una alimentación saludable, ejercicio o más horas de sueño. Existen muchas maneras de alcanzar ese bienestar interior y en esta oportunidad vamos a hablar de una de ellas: jardinería en tu casa.

Se trata básicamente de cultivar plantas, pero en un espacio que es tu hogar.

Esta tarea (hay que decirlo así porque requiere de un ojo experto, riego diario, perseverancia, entre otras cosas) puede resultar un poco más compleja de lo que pensabas, pero los resultados son extraordinarios. Entre sus beneficios encontrarás:

• Conexión con la naturaleza 
• Aire más puro para tu hogar
• Actividad que puede compartirse en familia

Algunas cosas van a depender del espacio con el que cuentes para empezar a armar tu propio jardín, pero esto no es condicionante para tal tarea. Ya sea en un jardín en la parte trasera de tu casa o en un balcón/terraza, algunos elementos son esenciales:

• Pala de punta, solo necesaria para excavar superficies grandes de tierra.
• Trasplantador
• Macetas
• Tierra, abono y semillas
• Kit de herramientas, que incluya rastrillo, pala de mano, tijeras para tallos y guantes.
• Pulverizador para controlar plagas e insectos
• Regadera
• Cubo o carretilla para guardar todos los elementos

Si bien hay muchas plantas bonitas, es cuestión de investigar un poco sobre sus cuidados. Por ejemplo, es recomendable tener macetas grandes ya que las pequeñas suelen condicionar el crecimiento de las mismas.

Las plantas tienen sus mañas, sí. En nosotros está el prestar atención a las necesidades de cada una.

Por eso, como principiante empezá con aquellas que requieran de cuidados más simples:

• Luz y riego: son fundamentales. Regarlas cuando los rayos de sol son menos intensos. Buscá el equilibrio entre los factores luz, calor y agua.
• Cuidalas de los insectos: las plantas tienden a atraer insectos por lo que te recomendamos algunas plantas aromáticas. El orégano y el cilantro ayudan a ahuyentar insectos. 
• Informáte sobre los cuidados de las plantas que adquirís.
• Limpieza: quitar el polvo de las hojas y mantener limpias las bases de las macetas, así como el espacio que estén ocupando.

Como decíamos al principio de esta nota, son múltiples los beneficios de contar con plantas en tu hogar, ni qué hablar si lo volvemos una actividad tan completa como la jardinería.

La jardinería requiere de cierta precisión para maniobrar las herramientas o trasplantar plantas. Te demandará paciencia y tiempo, pero el resultado es una experiencia gratificante.

En cuanto a las plantas, mejoran la calidad del aire, ya que absorben dióxido de carbono y liberan oxígeno. Además de brindarte un ambiente más puro, ¡son estéticas! Visualmente aportan color, alegría y atraen las buenas energías, según el Feng Shui.

Lo bueno de las plantas es que podés aprovechar los diversos tamaños y formas para jugar en los ambientes. Esto te da la ventaja de utilizar tanto el suelo como las paredes.

• Plantas colgantes del techo: animate a usar espacios como la cocina o el baño para poner una de estas plantas. Ideales para espacios reducidos.
• Jardín vertical: lo bueno de estos jardines es que pueden ocupar tanto espacios grandes como pequeños, y así mismo pueden ir en exteriores o interiores.
• Cubre-macetas: úsalos como elementos decorativos que den un toque personal a tu hogar.
• Macetas: salí un poco de lo común y optá por elementos poco usuales, como jarrones, cajas de madera o tazas.
• Plantas, volúmenes y elementos: combiná distintos tamaños de plantas para darle dinamismo al ambiente. También podés sumarle algún elemento decorativo, como fotos, libros o lo que se te ocurra.